Cuatro amigos se encontraron en una fiesta, después de 30 años de no verse. Luego de tomarse algunas copas, uno de ellos se fue para el baño.Los que se quedaron comienzan a hablar de sus hijos.
El primero dice: Mi hijo es mi orgullo. Comenzó a trabajar como mensajero en una empresa; estudió, se graduó de Administrador de Empresas, escalo diferentes cargos;en su empresa y hoy es el presidente. Se hizo tan rico, tan rico, que para el cumpleaños de su mejor amigo, le regalo un Mercedes último modelo.
El segundo dice: ¡que bárbaro! Mi hijo también es un gran orgullo para mí. Comenzó trabajando como vendedor de pasajes. Estudió y se graduó de piloto comercial. Trabajar en una gran empresa aérea, resolvió entrar de socio en la empresa y hoy es el dueño de la mayor parte. Se hizo tan rico, que para el cumpleaños de su mejor amigo le regaló un viaje alrededor del mundo.
El tercero dice: Carajo, ¡¡Felicitaciones!! Mi hijo también es muy rico. Estudió y se graduó de ingeniero. Abrió una constructora y le fue tan bien que se hizo millonario. El también le regalo algo importante a su mejor amigo. Le construyó una casa en New York con vista al Central Park especialmente para él. Los tres se felicitaban mutuamente.
El amigo que había ido al baño llego y preguntó: ¿Qué les pasa que están tan felices?
Estamos hablando del orgullo que sentimos por nuestros hijos. ¿Y el tuyo? ¿Qué hace?
Mi hijo es gay, y se gana la vida trabajando de stripper.
Los amigos dijeron: ¡Qué desgracia, que decepción debes sentir, hermano!
Y él dijo: ¡Para nada! ¡Él es mi orgullo, tiene una suerte!!! En su cumpleaños el otro día, recibió una casa en New York con vista al Central Park, un viaje Alrededor del mundo y un Mercedes último modelo que le regalaron sus tres novios.
